Las exigencias del mercado empresarial, la aceleración del ritmo de vida, la inestabilidad económica y financiera y las condiciones desfavorables de algunos sectores llevan a que una buena parte de los colaboradores experimenten burnout laboral.
Esta condición, de la que ninguna persona está libre, impacta en el bienestar de los trabajadores, generando sentimientos de angustia, agotamiento emocional, alteraciones en el sueño, irritabilidad y ansiedad.
En este artículo, detallamos cuáles son las causas que provocan su aparición y explicamos qué puede hacer el sector de Recursos Humanos para mitigar su impacto.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el burnout es síndrome que surge como resultado de un estrés laboral crónico que no se ha gestionado con éxito y que se caracteriza por 3 dimensiones:
En los entornos laborales, siempre existen períodos más estresantes que otros. Pero si el desgaste de los empleados se prolonga en el tiempo y no existe un periodo de recuperación que les permita recobrar la calma, este estrés acaba convirtiéndose en crónico, generando un estado de agotamiento extremo.
Cuando los trabajadores experimentan cansancio mental y físico, su autoestima y entusiasmo se ven afectados, haciendo que se sientan abrumados y desmotivados, pierdan interés en los objetivos corporativos e incluso adopten una actitud negativa hacia su trabajo.
En lo que a las causas respecta, no existe una única razón que desencadena el síndrome de burnout laboral, sino que sus orígenes son múltiples y suelen incluir:
Así como es importante que el departamento de RRHH sepa cómo potenciar la experiencia de los empleados, construyendo iniciativas que impulsen su bienestar, también es fundamental que pueda reconocer los indicios que dan cuenta de burnout laboral.
Entre los principales síntomas encontramos:
Ahora bien, ¿qué puede hacer el personal de Recursos Humanos frente a estas situaciones? ¿De qué formas puede reducir o prevenir el agotamiento extremo de los colaboradores?
La forma en la que las personas se comunican entre sí tiene un enorme peso en la construcción de relaciones positivas y duraderas.
Como parte de su estrategia de humanizar la gestión de RRHH, el personal del área debe promover las interacciones accesibles, fluidas y transparentes, poniendo a disposición de los colaboradores diferentes canales para comunicar sus problemas y encontrar soluciones de manera conjunta.
Es importante reparar en el clima y la cultura organizacional. ¿Existe colaboración y trabajo en equipo? ¿Las interacciones se dan en un marco de respeto mutuo?
Estas cuestiones deben estar siempre presentes para lograr un ámbito laboral agradable que fomente la creatividad y brinde apoyo en momentos de crisis.
Para evitar que prolifere el burnout laboral entre los empleados, es importante ofrecer alternativas de trabajo flexibles, siempre que las condiciones de la posición lo permitan. Teletrabajo, modalidades de contratación híbridas u horarios flex son algunas de las posibilidades.
También es fundamental que desde RRHH se promueva la autogestión. Cuando los colaboradores pueden gestionar por ellos mismos diferentes aspectos inherentes a su vida laboral (licencias, permisos, carga y actualización de información personal, entre otros), se sienten más valorados y motivados.
Saber decir “no” cuando nos sentimos sobrecargados es esencial para preservar nuestra integridad psíquica, emocional y física.
En este sentido, Recursos Humanos debe animar a los empleados a saber reconocer sus límites, a fin de que puedan mantener un equilibrio entre vida laboral y personal.
Además, poder establecer límites ayuda a sostener la autonomía en el trabajo, especialmente cuando el micromanagement está presente.
Cuando las personas solo piensan en el trabajo y no se toman el tiempo para hacer actividades recreativas, tarde o temprano, acaban estresadas.
Por eso, el área de Recursos Humanos puede organizar salidas y actividades de ocio que permitan que los trabajadores se conozcan más allá de las instalaciones corporativas y fortalezcan sus relaciones interpersonales.
Los referentes de los diferentes equipos, así como los directivos y managers pueden ser grandes apoyos emocionales para aquellos colaboradores que están atravesando burnout laboral. Por lo tanto, es fundamental que estén capacitados para gestionar este tipo de situaciones.
Al mismo tiempo, el sector de Recursos Humanos debe propiciar la enseñanza de técnicas que permitan manejar el estrés, como la meditación, la respiración, el yoga y otras estrategias de relajación que liberen tensiones.
RRHH no solo debe diseñar iniciativas que ayuden a prevenir este síndrome, sino también enfrentarlo una vez se presenta y ayudar a quienes lo sufren a recuperarse.
Para hacerlo, puede desplegar acciones para involucrar a los colaboradores en actividades recreativas, autorizar descansos adicionales a los contemplados por ley e instar a supervisores y otros miembros del equipo a ayudarlos a solucionar inconvenientes antes de que se conviertan en desafíos abrumadores.
Si estás pensando en estrategias para reducir el impacto del burnout laboral en los empleados de tu compañía, en Napsis podemos ayudarte. Nuestra solución 100% digital fomenta la autogestión de los colaboradores, mejora la comunicación interna y libera a los equipos de RRHH de tareas repetitivas y desmotivadoras para que puedan concentrarse en actividades más enriquecedoras para su desarrollo profesional. ¿Querés saber más sobre ella? Mandanos un mensaje.