Independientemente de la solución que se ponga en el mercado o del tamaño que tenga una organización, la productividad laboral es un factor clave para el éxito de las organizaciones.
Cuando los empleados de una empresa son productivos, los objetivos se alcanzan con mayor rapidez, se reducen los costos y se obtiene una mayor rentabilidad.
Si bien la productividad depende, en cierta medida, de factores y características personales, existe un departamento que puede ayudar a impulsarla, poniendo en práctica una serie de estrategias. ¿De cuál estamos hablando? Del sector de Recursos Humanos.
En este artículo, te contamos de qué formas el área de RRHH impulsa la productividad laboral.
Cuando hablamos de productividad en los ámbitos de trabajo, nos referimos a la eficiencia y eficacia con la cual un colaborador contribuye a alcanzar los objetivos corporativos.
Se trata de un indicador clave de rendimiento que mide la performance del trabajo en función del tiempo, el esfuerzo y los recursos con los que se cuenta.
En este sentido, un trabajador productivo no es aquel que realiza cada vez más tareas, sino el que produce los mejores resultados en una menor cantidad de tiempo de manera sistemática.
La productividad de los colaboradores tiene una enorme relevancia para el éxito de las organizaciones. En primer lugar, mejora el desempeño del personal, potenciando la Employee Experience y fomentando la motivación de los trabajadores.
Cuando los trabajadores son productivos, se involucran en la cultura de la empresa y en la creación de un entorno de trabajo ameno, factores que, a largo plazo, seguirán repercutiendo positivamente en sus funciones.
Al mismo tiempo, la productividad optimiza las relaciones con los clientes. Cuando los colaboradores son productivos, los consumidores se benefician con productos o servicios de mejor calidad, procesos más eficientes y tiempos de respuesta más rápidos.
Finalmente, la rentabilidad empresarial también se beneficia con la presencia de trabajadores productivos. Si pueden terminar sus tareas en tiempo y forma, tendrán tiempo para dedicarse a actividades estratégicas, incrementando aún más la productividad y los buenos resultados del negocio.
Por la posición que ocupa dentro de las organizaciones, el personal de Recursos Humanos tiene la capacidad de diseñar iniciativas que impacten de manera transversal en todas las áreas.
Es por este motivo que cumple un rol crucial para impulsar la productividad laboral. ¿Cómo puede hacerlo? De diferentes maneras.
Cuando RRHH recluta a las personas adecuadas, es decir, a candidatos que además de estar cualificados, encajen bien con la cultura organizacional, contribuye a crear un entorno laboral productivo y positivo.
Los colaboradores que encajan bien en sus funciones podrán hacerlas con mayor eficiencia y, por ende, estarán más satisfechos con su trabajo, allanando el camino para lograr una mayor productividad y una menor rotación.
Trabajar en una empresa que priorice la flexibilidad es un gran aliciente para los colaboradores.
Por eso, siempre que la naturaleza de las tareas a realizar lo permita, el área de Recursos Humanos debe fomentar la creación de entornos flexibles, en los cuales los empleados puedan no solo trabajar desde sus hogares o espacios de coworking en horarios flex, sino también tengan la posibilidad de acceder a herramientas de autogestión.
De esta forma, gestionarán mejor sus actividades y estarán más motivados para realizarlas, lo que redundará en el aumento de la productividad laboral.
Trabajar 5, 6 o más horas en un lugar en el cual la temperatura es demasiado alta o muy baja, la iluminación es deficiente, el mobiliario es incómodo y el ruido es intenso puede convertirse en una verdadera pesadilla para cualquier persona.
Para contribuir a una experiencia del empleado positiva y evitar la rotación constante, el sector de RRHH debe asegurarse de que estos escenarios no ocurran. En primer lugar, las instalaciones tienen que tener la iluminación adecuada para evitar que los trabajadores tengan que forzar la vista y experimenten dolores de cabeza o somnolencia.
Asimismo, es importante que los espacios de trabajo no sean excesivamente fríos o cálidos y que los escritorios y las sillas sean ergonómicos, a fin de que el personal no tenga que invertir tiempo en levantarse para acomodarse o ajustar los respaldos.
Finalmente, es importante revisar que los niveles de ruido no perjudiquen el correcto desempeño de las funciones, impactando negativamente en la concentración y, por ende, en la productividad laboral.
Una de las formas más importantes en que el sector de Recursos Humanos contribuye a la productividad de los empleados es a través de la implementación de programas de formación y desarrollo.
En este punto, el personal de RRHH debe colaborar con los líderes de cada departamento a fin de identificar las habilidades que los trabajadores necesitan incorporar. Luego, es fundamental que creen e implementen iniciativas de capacitación para satisfacer estas necesidades, como talleres, cursos, plataformas de aprendizaje en línea o tutorías.
Por último, para lograr que los empleados sean más productivos, es imprescindible que las organizaciones cuenten con plataformas de gestión del talento que fomenten la autogestión de los empleados y les permitan ejecutar por ellos mismos determinadas acciones relacionadas con su vida laboral.
Al adoptar este tipo de soluciones, el personal de RRHH se libera de las tareas más operativas, ganando tiempo para dedicarse a funciones más estratégicas. Esto, en definitiva, aumenta su productividad.
En paralelo, gracias a estos software, los colaboradores pueden resolver autónomamente acciones como pedidos de licencias, carga de datos y documentaciones o firma del recibo digital. De esta forma, tienen más tiempo para tareas más productivas.
Si estás buscando una plataforma integral de gestión de RRHH que permita impulsar la productividad laboral en tu organización, mandanos un mensaje.